El gobierno reafirmó su intención de multar a los bancos por los cajeros automáticos que sean robados o detonados. La nueva legislación vigente les exige alarmas, cámaras de alta definición y aparatos blindados. Se detalla que el subsecretario del Interior matizó sus declaraciones iniciales al señalar ahora que los cajeros que no cumpliendo los requisitos sean explotados serán sancionados con una multa de 40 millones. Finalmente, se indica que de acuerdo a la ley actualmente deben estar habilitados los sistemas de alarma y cámaras, pero que desde octubre se deberán implementar las otras medidas disuasivas.
Opina el experto en seguridad y prevención, david Rozowski.

Deje su comentario